
El trabajo te exige como si fuera un carcelero. Sientes que trabajas horas y horas y más horas pero sin avanzar apenas y que el móvil no para las veinticuatro horas del día, los siete días de la semana, pero el tiempo sigue siendo el que es y no das abasto. Estás agotado y harto. Sufrés estrés.
Qué es el estrés
Si pidiera a dos personas diferentes que definieran estrés, cada una lo haría de manera distinta. Porque el estrés es una experiencia subjetiva, personal. Lo que para ti es estresante para mí no lo es.
De hecho, si te pidiera: ¿dime en una sola palabra qué es estrés para ti?
¿Qué me dirías?
Si yo hubiera respondido a esta pregunta hace 15 años, antes de volver a mi profesión de psicóloga y de convertirme en especialista de estrés, cuando trabajaba en empresas líderes en el área de negocio, te hubiera dicho que estrés para mí era potencia. Más capacidad.
Qué equivocada estaba.
Fueron tantos años que me serví de esa potencia, erróneamente, que el estrés arrasó con mi energía. Y fue lo que hizo que buscara respuestas, e incluso cambiar de profesión para dedicarme a ello porque lo que encontré me fascinó.
Pero si te respondo hoy a la misma pregunta, independientemente de todo lo que sé sobre estrés, te diría que estrés para mí es bloqueo.
Si trabajo o vivo bajo estrés pierdo capacidad mental y física, y tengo mucha menos energía.
¿Y para ti? ¿Qué palabra define tu estrés?
Puede ser ansiedad, presión, agobio, bloqueo, malhumor, desánimo, dolor en el pecho, agotamiento…
Y así, podemos seguir con cada persona, con cada experiencia…
Esto se lo puso muy díficil a los científicos. Ya sabes que en Ciencia lo mejor es tener definiciones concretas y objetivas.
Te cuento un poquito de historia:
La primera persona que definió el «estrés» fue Hans Selye en 1936. Hans Selye era un fisiólogo astrohúngaro (aunque luego se nacionalizó canadiense) que es considerado el padre del estrés.
Lo definió como «la respuesta inespecífica del cuerpo ante cualquier demanda de cambio».
Es decir, una respuesta imprecisa, indeterminada, abstracta. .
Selye observó en experimentos con animales de laboratorio sometidos a estímulos físicos y emocionales nocivos agudos pero diferentes (luz fuerte, ruido molesto, frío o calor extremo, frsutración prolongada…) sufrían de una serie de síntomas similares: úlceras de estómago, disminución de la función inmune (de las defensas), agrandamiento de las glándulas suprarrenales (que es donde se segregan las hormonas del estrés)…
Y las consecuencias eran que desarrollaba enfermedades como las de los humanos: ataques cardíacos, derrames cerebrales, enfermedades renales y artritis reumatoide.
Esto supuso un impacto pues hasta entonces se creía que las enfermedades solo las causaban los agentes infecciosos. Selye fue capaz de separar los efectos físicos del estrés de otros síntomas sufridos por otras enfermedades.
Y así se definió el concepto de estrés como «conjunto de reacciones fisiológicas del organismo a diferentes agentes nocivos del ambiente». Ya hablamos un poco de eso en el blog.
Actualmente la definición ha evolucionado e incluye no solo las reacciones fisiológicas del cuerpo sino tambien, la respuesta psicológica y de comportamiento de una persona que busca adaptarse y reajustarse a presiones tanto internas como externas.
Imagino que esto te resultará más familiar:
Ante presiones internas o externas. Presiones internas como el autodiálogo (lo que te dices y exiges) o presiones externas (como por ejemplo la actualidad tan compleja que vivimos o un jefe) cada persona se siente de una determinada manera y se comporta de un cierto modo, completamente diferente a nivel mental, físico y emocional.
Todo eso es la respuesta de estrés, que como decía al inicio es una experiencia única de cada ser humano.
- Unos lo desarrollan más a nivel físico: dolor en alguna parte del cuerpo, tensión, nerviosismo…
- Otros, a nivel mental: como bloqueo (mi caso), dispersión, bruma mental…
- Y otros a nivel emocional: tristeza, mal humor, angustia, ansiedad, ira…
Por eso es un término tan complejo de definir.
De hecho, en 1951 muchos científicos debido a la confusión y un médico concluyó en una edición del British Medical Journal que «el estrés además de ser él mismo, también era la causa de sí mismo y el resultado de sí mismo».
¡Casi nada!
Selye, en sus últimos años, cuando se le pidió que definiera el estrés, dijo a los periodistas: «Todos saben lo que es el estrés, pero nadie lo sabe realmente».
Así que si eres de los que tampoco lo sabía realmente, como ves, no es de extrañar.
Yo te sugiero que te acuerdes de lo que significa estrés cuando sientas que la demanda del medio exige más de los recursos que tienes a disposición.
Ahí aparece tu respuesta de estrés.
Pero tiene remedio, se puede gestionar y reducir su impacto.
Solo que antes, hay que empezar por entenderlo. Y ese era mi objetivo.
Espero haberte ayudado.
Reader Interactions